La frase "Less is More" aplica para muchas cosas y entre ellas está la comida. Normalmente se piensa que en la gastronomía, lo elegante es sinónimo de complejo. Que mientras más elaborada sea la receta de un platillo es mejor. En lo personal, creo que eso no siempre es cierto. La simplicidad de un platillo puede darle exactamente la clase que algunas ocasiones ameritan. Los sabores naturales de algunos ingredientes son tan suculentos y complejos por sí solos, que no necesitan mucha condimentación. El salmón y los espárragos son ejemplo de ello. Es por eso que te dejo esta receta para hacer un platillo que se ve elegante (además de que tiene un sabor fuera de este mundo) pero no requiere ninguna habilidad especial en la cocina para hacerlo.
Primero, obviamente, los ingredientes. Para condimentar no se necesita otra cosa que lo que seguro tienes en tu cocina: un limón, mantequilla, sal y pimienta. En el super tendrás que comprar salmón (pide que te den el o los trozos de 250-300 gramos, albur free), espárragos naturales (de una vez te aviso: en la Comer no tienen, ve a Superama para más seguro) y vino blanco (piensa en el maridaje porque usarás un poquito para cocinar y el resto para comer, o sea que no compres Padre Kino o alguna porquería así).
Es inminente que primero abras la botella de vino y te sirvas una copa. Se cocina mejor si te estás tomando una y más adelante necesitarás que la botella ya esté abierta.
Los espárragos. Pon a hervir agua con un puñito de sal y córtale la parte de abajo a los espárragos (sólo lo que se ve más blanco). Una vez que hierva el agua, pon los espárragos a cocer. Tardarán unos 8 minutos en estar listos. La idea es que estén cocidos, pero crujientes (si los dejas cociendo demasiado se ponen fibrosos).
Una vez que estén cocidos, sácalos y ponlos unos segundos en agua fría. Esto sirve para detener la cocción y mantener el color verde intenso de los vegetales. De ahí los sirves directamente al plato y le pones (si tienes) tantito aceite de oliva a las puntas. Nótese que para manejar y servir los espárragos usé un utensilio fácil de obtener: unas pinzas para hielos robadas del antro (la próxima vez que vayas a un bar o un antro, róbate unas, no les importará...tanto).
El salmón. Primero ponle unas gotas de limón al filete, sal y pimienta. Verás que el limón cocerá un poco la carne del salmón (desde ese momento ya empiezo a salivar).
Pones a calentar una sartén y ya que tenga una temperatura alta le echas un pedacito de mantequilla para que se derrita. Una vez derretida la mantequilla, pones el filete de salmón a asar con la carne hacia abajo. A mí me gusta comprar el salmón con piel ya que cuando lo volteas hace que se cosa la carne y mantenga lo jugoso.
El tiempo de cocción del salmón depende totalmente de qué término te gusta más. Yo te recomiendo que dejes asar tantito el filete boca abajo para que la carne absorba la mantequilla y se dore un poco, ya luego lo volteas y controlas la cocción con la piel abajo (al cabo no importa si ésta se termina quemando). Para calcular el término presiona el filete un poco y mientras más duro lo sientas más cocida está la carne.
Una vez que esté el filete, apagas la sartén y lo sirves en el plato. Luego tomas la botella de vino blanco y sirves un poco en la sartén caliente. Lo frío del vino hará que lo que estaba pegado en el fondo se despegue y se mezcle con el vino mientras a éste se le evapora el alcohol (¿si pusiste el vino a enfriar, verdad? digo...es vino blanco).
Esta especie de salsa que se hace se la viertes encima al filete y listo. Nice and easy.
Como te podrás dar cuenta, está facilísimo de hacer y se ve bastante bien. Esta receta es perfecta para cuando vas a cenar con alguien más y no quieres algo pesado, pero que se vea que estás haciendo el esfuerzo. Así que sírvete otra copa de vino (supongo que ya te acabaste la primera que te serviste) y una a todos tus comensales y a comer. No es necesario que tengas compañía para cocinar esto, aplica también para el 'forever alone'.
Extra: qué mejor para cocinar salmón que 'The Salmon Dance' ;)
Nota: recuerda que si quieres ver las imágenes en mayor tamaño, sólo dales click encima.
No hay comentarios:
Publicar un comentario